El gran propósito en el mundo de la arquitectura y de la construcción, en la actualidad, está siendo, de manera notable, reducir la demanda energética. Un objetivo que se consigue trasladando el gran lema de la economía circular protagonizada por las tres R: reducir, reutilizar, reciclar, enlos edificios. Es en este punto cuando hablamos de eficiencia energética, de instalaciones eficientes y de energías renovables.
En Barcelona, estos tres términos son englobados por las llamadas Trías energéticas y deben estar presentes en todos los diseños de edificios realizados por los arquitectos, para, de esta manera, poder minimizar la demanda de energía y crear un buen clima en el interior. ¿Cómo? Aplicando un óptimo aislamiento y una protección solar inteligente.
Por otro lado, el uso de bombas de calor y otros sistemas, como, por ejemplo, los suelos radiantes, logra que las temperaturas interiores sean más confortables, pero, a la vez, más inteligentes. Energía que, claramente, debe provenir de fuentes renovables, a través de paneles fotovoltaicos y pozos geotérmicos.
No cabe duda de que, ante esta situación, estamos experimentando una clara evolución de la industria de la construcción y de la arquitectura. Sectores que, aunque suelen ser un poco arcaicos, están cambiando rápidamente ante la grave situación en la que nos está posicionando el cambio climático. Y, lamentablemente, la construcción tiene parte de culpa de este problema mundial.
En medio de todos estos cambios y de todas estas evoluciones, está teniendo un gran papel la llamada tecnología low-to-no-tech. ¿En qué consiste? Pues bien, es una tecnología simple y de bajo coste, que puede ser empleada en edificios residenciales, con el objetivo de mejorar la eficiencia energética y reducir el impacto ambiental, ya que disminuye la huella de carbono.
Para que se pueda entender mejor el tipo de tecnología de la que nos referimos, te ponemos algunos ejemplos de low-to-no-tech:
- Aislamiento térmico: la instalación de aislamiento térmico en paredes, techos y suelos puede reducir significativamente el consumo de energía para calefacción y refrigeración.
- Ventilación natural: una solución low-tech que puede mejorar la calidad del aire interior y reducir el consumo de energía para ventilación.
- Iluminación natural: la utilización de la luz natural, en lugar de la eléctrica, puede reducir el consumo de energía y mejorar el confort de los residentes.
- Agricultura urbana: la agricultura urbana en terrazas, balcones y jardines puede proporcionar alimentos frescos y reducir la cantidad de energía necesaria para transportar alimentos desde lugares lejanos.
- Energía renovable: la instalación de paneles solares o turbinas eólicas puede proporcionar energía renovable a los edificios residenciales.
Edificio Londres, ejemplo de tecnología low-to-no-tech
El edificio de viviendas ubicado en el barrio de Marina, en Barcelona, llamado Edificio Londres, es uno de los ejemplos más claros de querer ahorrar energía. Se construyó por la promotora AQ Acento y se aplicaron una serie de tecnologías bioclimáticas pasivas anticuadas que se aunaban con paneles fotovoltaicos modernos y sistemas de almacenamiento de energía.
Sin duda, este conjunto urbano se ha convertido en una combinación de grandes y acertadas decisiones de diseño:
- Estrategias bioclimáticas
Se redujo la demanda de energía primaria del edificio, teniendo en cuenta, sobre todo, la temporada de verano, puesto que los inviernos en la Ciudad Condal son relativamente suaves.
El sistema que se llevó a cabo, por lo tanto, tenía el objetivo de evitar las emisiones de gases de efecto invernadero, sin tener que renunciar a un clima confortable.
Dicha arquitectura bioclimática insta a que la vivienda se diseñe con las ventanas colocadas en fachadas opuestas o perpendiculares, lo que provoca que estas se abran simultáneamente y se cree un flujo natural de aire fresco en el inmueble. Este sistema, sin duda, logra un efecto ventilador que crea una sensación fresca en el usuario, sin tener que enfriar el aire.
Por otro parte, se quiso llevar a cabo una protección contra la radicación solar. La manera en la que se realizó fue colocando voladizos sombreadores sobre las ventanas acristaladas. Después, se hizo un análisis de la cantidad de energía solar que recibía la fachada en cada temporada, teniendo en cuenta la orientación y las sombras de los edificios que rodean estas viviendas.
- Eficiencia energética
Este conjunto de edificios va conectado con la red urbana de calor y frío de ECO. Un tipo de red que tiene una eficiencia mucho mayor que los sistemas más convencionales. Además, tanto el frío como el calor se originan por fuentes sostenibles. Por ejemplo, la energía fría es reciclada por parte de la central de gas natural licuado del puerto de Barcelona.
- Energía renovable
Se instalan aproximadamente 70 kWp en el edificio Londres para poder obtener la energía de fuentes renovables. Pero, ante esta situación, surge otra cuestión: cómo gestionar esta energía generada para que tenga sentido en el colectivo residencial.
Toda la energía solar que no se consume va directamente a la red general, el punto donde se redistribuye con una eficiencia menor que si se consumiera en aquel momento. No obstante, en este proyecto, los arquitectos integraron baterías de 45 kWh para poder almacenar la energía y consumirla en el momento en que lo necesitasen, que, sobre todo, es por la noche, cuando las luces están encendidas.
¿Qué te ha parecido este proyecto? Para nosotros, como fieles defensores de la sostenibilidad y la eficiencia energética, ¡nos encanta! Y más, cuando detrás de estos proyectos hay un gran equipo que no solo se preocupa por el diseño del edificio, sino también por el confort humano y por la salud del planeta. Para nosotros es una filosofía que en Theseconnect y en el grupo en general nos representa.